Generalmente cuando escogemos un cachorro nos dejamos llevar por juicios puramente estéticos y/ó porque es simpático sin conocer en lo más mínimo las características de la raza a la cual pertenece y las exigencias vitales que, a lo mejor, no serán plenamente satisfechas por el hábitat que en que vivimos o disponemos para ofrecerle.
Por tanto, deberíamos considerar algunos detalles que mencionaremos a continuación:
Deberíamos adquirir un cachorro o adoptar un perro adulto?
La edad del perro tiene una importancia particular.Esto es porque normalmente se prefiere elegir un cachorro de dos o tres meses más que a un perro adulto porque somos nosotros quienes lo educarán de acuerdo a nuestro ambiente familiar, y se habituará a nuestra forma de vivir ,Sin embargo,esto suele ser a veces un gran error y se debe más que nada a la gran ternura que inspira un cachorrito de un mes a más, y no tomamos en cuenta el gasto aparentemente inferior que se debe efectuar (vacunas, desparacitaciones, visitas médicas).
Además no olvidemos que debemos levantarnos muy temprano para enseñarle a ocuparse en los lugares adecuados y no ensuciar en diferentes lugares de la casa.
También tomar en cuenta que son como niños que harán travesuras y romperán cosas que llamen su atención.
Algo totalmente diferente a un perro adulto, quien no necesita visitas continuas al veterinario, ni muchos cuidados, ya saben donde ocuparse generalmente, el problema radica en que no sabemos qué costumbres y/o hábitos traen consigo, pero allí está lo hermoso de tener una mascota de 4 patas, es increíble descubrir ese interior canino, que muchas veces resulta enriquecedor.
Macho o Hembra?
Respecto al sexo del ejemplar a adquirir, no existen especiales ventajas en favor de uno u otro. Todo depende del futuro propietario.
Sin embargo, generalmente los machos son más solicitados, especialmente por quienes tienen la necesidad de un perro con un carácter más fuerte e inquieto, y no quieren las complicaciones inherentes a los dos períodos estacionales de celo, por los cuáles han de pasar las hembras(sangrados vaginales que se prolongan durante aproximadamente 02 semanas y que pueden manchar de sangre muebles, alfombras y camas) .
Durante todo este tiempo, es preciso, además, mantener a las perras alejadas de los machos para prevenir el obvio peligro de un embarazo indeseado.
Todo esto no quita que las hembras sean más dulces, afectuosas y, a menudo más tolerantes con respecto a otros animales, protectoras de sus dueños.
Elección de la Raza
En el momento de la elección deberíamos tenerse muy presente la razón que nos motiva el querer tener un perro, cuáles son las tareas que habrá de cumplir.
Prescindiendo del hecho de que el perro siempre debe considerarse ante todo, como un compañero afectuoso, las principales funciones que deberá desarrollar, según la raza, pueden resumirse de esta manera:
- Hacer de guardián, defensa.
- Ayudar al amo en caso de inhabilitación.
- Una compañia.
Es obvio que cada raza tiene exigencias diferentes que es preciso considerar, para ver hasta qué punto es posible satisfacerlas o no.
Vayamos por partes:
Quien opta por un perro de caza debe poder asegurarle largos paseos diarios y un lugar donde correr libremente, para que el perro adquiera el hábito de los espacios libres y su temperamento pueda desarrollarse de acuerdo con las funciones que habrá de realizar como auxiliar cinegético.
Los perros de guardería, defensa y utilidad, se distinguen por el mayor tamaño, el temperamento fuerte y la notable musculatura: tienen necesidad de realizar mucho ejercicio y disponer de amplios espacios donde poder correr. Requieren, por parte del amo, algún sacrificio extra, pero son capaces de dar grandes satisfacciones.
Sin embargo, el campo más amplio para la elección es, sin duda, el de los perros de lujo y compañía. Salvo pocas excepciones, son animales que se adaptan a vivir en un piso de ciudad tienen pocas exigencias especiales respecto a razas de mayor tamaño: estas características los convierten en ideales compañeros de niños y ancianos.
Entre todas las razas: existen perros de 03 tipos de pelo.
- Pelo largo.
- Pelo duro
- Pelo liso.
Las primeras presentan el defecto de la pérdida del pelo durante la muda, lo que constituye gran problema, especialmente dentro de la casa. Los perros de pelo duro tienen mayores necesidades que los otros, de un determinado arreglo del mismo, mientras que los de pelo liso, en cambio, presentan menores dificultades en lo relativo a la limpieza.
Una vez elegido el perro que se adecúa a nuestras exigencias, se plantea el problema de dónde adquirirlo.
La elección del criador o revendedor es importante para procurarse ejemplares sanos, de raza pura y a un precio justo.
Es conveniente, por tanto, informarse para no cometer errores y terminar decepcionados.
